Powerbox ha anunciado el lanzamiento de su primera solución de suministro de potencia "industrial" para aplicaciones sumergidas, como las máquinas informáticas con hipercarga. La OFI600A12 es la primera fuente de alimentación comercial diseñada para cumplir con las especificaciones de aplicaciones sumergidas y garantizar el más alto nivel de seguridad para el sistema y los operadores.

Con sus funciones de supervisión digital incorporadas, la OFI600A12 puede ser reconfigurada de fábrica en pocos minutos para satisfacer tareas y demandas específicas.

La PRBX OFI600A12 es el resultado de dos años de investigación y desarrollo y ha sido validada por los equipos de I+D y calidad de Powerbox como plataforma certificada para una nueva generación de fuentes de alimentación para aplicaciones sumergidas. La OFI600A12 se basa en un diseño de corrección del factor de potencia (PFC) en modo de transición intercalado, con un convertidor LLC como segunda etapa. Está diseñada para tener la corriente de arranque más baja posible, menos de 10A a 264VAC. El producto tiene una tensión de entrada de 187 a 265VAC, salidas duales que comprenden un master de 12V/600W y un auxiliar independiente de 5V/10W, y su eficiencia es de hasta el 93%.

La OFI600A12 incluye encendido/apagado remoto, reinicio remoto, protección contra sobrecorriente y sobretensión, y cumple con las regulaciones de seguridad y EMC. Dependiendo de la aplicación, puede ser necesario que la protección de salida sea una de las configuraciones posibles (apagado, modo de Hiccup o corriente constante), cumpliendo este requisito, la OFI600A12 puede reconfigurarse según corresponda. Basado en los perfiles definidos en el firmware y la configuración de la protección de salida, el modo de operación puede ser seleccionado en fábrica en pocos minutos para cumplir con los requisitos de aplicaciones específicas. La unidad está protegida por un revestimiento de protección y cumple con las directivas RoHS y REACH.
El concepto de centros de datos sumergidos surgió en 2005 y, tras una serie de pruebas y experimentos exitosos, se ha convertido en una realidad de mercado. La tecnología requiere una especial precaución a la hora de seleccionar los componentes de conmutación de potencia, aunque las prácticas de fabricación son muy similares a las requeridas por la industria naval en términos de robustez y la capacidad de soportar la operación en altos niveles de humedad o ambientes salinos.
"Con la creciente preocupación por el medio ambiente y la optimización de la energía, los centros de datos sumergidos se están extendiendo y una serie de aplicaciones industriales integradas han adoptado ordenadores sumergidos, que requieren fuentes de alimentación compatibles, que están diseñadas, probadas y certificadas para funcionar de forma segura cuando se sumergen en un fluido refrigerante. Dijo Patrick Le Fèvre, Director de Marketing y Comunicación de Powerbox. “
Con años de experiencia y conocimientos en el desarrollo de fuentes de alimentación para la industria naval, los diseñadores de Powerbox han trasladado las mejores prácticas de diseño robusto a la electrónica sumergida. Además de requerir un nuevo enfoque mecánico para facilitar la circulación del fluido a través y alrededor de la fuente de alimentación, los diseñadores tuvieron que investigar la compatibilidad de cada componente con los fluidos de refrigeración para garantizar que mantendrán sus prestaciones mecánicas y eléctricas cuando se sumerjan, por ejemplo, el riesgo de corrosión. El proceso de desarrollo también incluyó un exhaustivo análisis de riesgos para verificar que cuando se sumerge el producto final funciona con el más alto nivel de seguridad para los usuarios y el equipo.

Más información o presupuesto